Las parcelas de viña para la elaboración de este vino están finamente seleccionadas y reciben el más delicado trabajo durante todo el año para que la materia prima esté en excelentes condiciones. Las viñas son raleadas para regular que los kilos por hectárea no sean superiores a 6.000 kilos. El momento de cosecha se determina una vez la uva alcance el mayor punto de madurez polifenólica posible. La cosecha es 100% manual y se transporta a la bodega en cajones, donde recibirá el mayor mimo enológico. Una vez que se encuentra en las piletas, comenzará la maceración para extraer todos los compuestos que se buscaron con los trabajos en la viña. La maceración dura más de 22 días, a temperaturas controladas y recibiendo intensos remontajes y delestage. El Corte Supremo realiza fermentación maloláctica y luego se deja reposar en cubas de concreto para que realice un proceso de clarificación y estabilización natural. Este proceso es duradero y muy delicado. Luego realizará la crianza en los mejores robles de la bodega, donde estará durante 18 meses.
Corte Supremo Tinto
El aspecto visual es de un color rubí intenso y maduro. Con aromas muy complejos y elegantes, de cuero, café, tabaco, en un fondo de frutos rojos muy maduros, y madera bien fundida. En boca es intenso y sedoso, desplegando gran complejidad. Taninos muy maduros y afinados pero aún vigentes. De final largo y cálido. Se sostiene con firmeza para confirmar su distinción.