Para el Reserva Familiar Syrah , la cosecha es de 12 toneladas por hectárea. Una vez las bayas toman color y empiezan a concentrar azúcar, se comienza a realizar muestreos y degustar la baya para determinar el momento de cosecha. Esto se decide cuando se obtiene el balance perfecto entre la concentración de taninos y antocianos, el azúcar y la acidez. Una vez la materia prima está madura, se transporta a la bodega en cajones para ser vinificada. El proceso comienza con la molienda de la uva y luego se realiza la fermentación y maceración en cubas de concreto. Una vez en las piletas se le da dos remontajes diarios para obtener el color y estructura deseados. Este proceso dura 10 días y es clave para obtener una nariz fresca, una boca redonda y un color óptimo.
Luego de la fermentación maloláctica, el 50% del vino tiene un pasaje por roble de seis meses.